Qatar es una ciudad que se ha hecho famosa a nivel mundial en estos últimos 15 años; ahora se encuentra a las puertas del “mundial de futbol”, y todos los ojos de la humanidad estarán pendientes de este evento que nos presenta la diversión globalizada. Lleno un poco más, ¿por qué escogieron Qatar para el mundial?
Bueno, la misma pregunta va para Brasil (2014). Algunos críticos hacen ver que los beneficiarios principales de esta decisión de la FIFA de realizar el mundial en Qatar, son la familia real Al Thani (con un patrimonio de 350 millones de dólares). Esta familia poderosa tiene entre sus propiedades de inversión, el Club deportivo del futbol francés PSG. La realidad de desigualdad en Qatar es que el 1% posee el 29% de la riqueza nacional.
Qatar es un territorio de 11.586 km², más pequeño que El Salvador en Centroamérica. Está ubicado en la península Arábica del Golfo Pérsico, en una cuenca petrolífera que lo vuelve la tercera fuente mundial de gas y petróleo. Es una ciudad que evidente no tiene ni promueve convencionalmente un gobierno democrático; solo para recordar, “la Corte de Apelaciones impuso, en mayo del año 2001, condenas a muerte para Hamad ibn Jassem al-Thani y otros dieciocho acusados del intento del golpe del año 1995.”[1] En cuanto a la equidad de género tiene una brecha del 61.7%.
Qatar tiene una población de 2.930.524 personas, de los que un 79,66% son inmigrantes, es el segundo país con más porcentaje de inmigrantes del mundo, es decir, el 20% son cataríes y el 80% es inmigrante. La cultura de la población ha tenido un giro, como lo dice, Kaltham Al Ghanim, profesor de sociología de la Universidad de Qatar. «Nuestra vida social y económica ha cambiado, las familias se han separado y la cultura del consumo ha ganado terreno… La vida de la familia catarí está atomizada. Los niños por lo general son criados por niñeras traídas de Filipinas, Nepal o Indonesia, y la brecha cultural es cada vez más amplia entre las distintas generaciones… La sociedad catarí está definida por clases, asociadas generalmente a la raza. Es extremadamente desigual.»[2]
Como todos los países que están en la lógica de una economía de mercado, que enriquece a minoría a base de la injusticia, en Qatar, en cuanto a la situación de los migrantes, Amnistía Internacional, hace las siguientes denuncias de abusos o violación de los DDHH de los migrantes, por ejemplo, la mayoría migran son de Nepal, Bangladés e India, estos tienen que “pagar elevadas comisiones” a agencias de “contratación”, van desde $400 hasta $4,300. El 90% de los que trabajaron en la construcción del estadio “Khalifa” son extranjeros.
Los migrantes se han visto forzados a dejar sus tierras, por la situación de empobrecimiento y mala calidad de vida en sus países de origen. Entre otros datos de la situación de los migrantes en Qatar, son: 1,7 millones de migrantes trabajan en mano de obra (esto incluye los 8 recientes estadios para el mundial). Otros abusos que se han registrado hacia los migrantes, son: mentiras en el pago de los salarios, hay casos que nos les pagan el salario por los primeros meses, algunos empleadores han confiscado los pasaportes de los trabajadores migrantes, “Algunos empleadores no expiden o renuevan el permiso de residencia a sus trabajadores, a pesar de que están obligados a hacerlo según el derecho qatarí… Normalmente, los trabajadores soportan condiciones de hacinamiento y de falta de higiene y seguridad en sus alojamientos. Vimos a hombres durmiendo en literas, en habitaciones para ocho o más personas.”[3] Todas estas situaciones que vive el migrante, hace ver las situaciones de injusticia globalizada estructurada en este “mundial” en Qatar.
Lo que sí, nos presentarán la estructura mediática montada por el gran capital mundial, serán los dos millones de migrantes “turistas” que tendrán documentación regular, que estarán siendo partícipes de este show futbolístico.
Cerremos esta reflexión con las palabras del papa Francisco en la “108ª JORNADA MUNDIAL DEL MIGRANTE Y DEL REFUGIADO 2022”, expresó enfáticamente: “Nadie debe ser excluido. Su proyecto es esencialmente inclusivo y sitúa en el centro a los habitantes de las periferias existenciales. Entre ellos hay muchos migrantes y refugiados, desplazados y víctimas de la trata. Es con ellos que Dios quiere edificar su Reino, porque sin ellos no sería el Reino que Dios quiere. La inclusión de las personas más vulnerables es una condición necesaria para obtener la plena ciudadanía.”[4]
René Arturo Flores, OFM
RFM- Panamá
[1] https://www.nuevatribuna.es/articulo/cultura—ocio/paises-qatar/20220616162917199573.html#su-economia
[2] https://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/04/140429_qatar_riqueza_felicidad_lp
[3] https://www.amnesty.org/es/latest/campaigns/2016/03/qatar-world-cup-of-shame/
[4] https://migrants-refugees.va/es/jornada-mundial-del-migrante-y-del-refugiado/
Realmente que si no vemos desde el otro lado de estos eventos solo nos quedamos con la euforia de un mundial sin darnos cuenta que detrás de todo esto hay víctimas de explotación en todos los sentidos… muchas gracias por la reflexión.
Mi saludo fraterno y cordial René Arturo. Gracias por este importante artículo. Es una noticia de actualidad que nos permite tener un acercamiento a la realidad oculta del «pan y circo» que nos ofrece la sociedad de consumo.
Qué bueno que este tipo de acontecimientos nos lleven a reflexionar y actuar en defensa de la dignidad de la persona humana.